Tensión arterial: 5 consejos para controlarla.
La tensión arterial, o también llamada presión arterial, es un valor que mide la fuerza que ejerce la sangre al circular por las arterias. A mayor presión arterial, mayor número de problemas de salud, siendo importante cambiar el estilo de vida para hacer frente tanto a la hipertensión o tensión arterial alta o a la hipotensión o tensión arterial baja. Y es que, aunque tener valores bajos en las mediciones de la tensión arterial se considera un síntoma de buena salud, los valores extremos en ambas son realmente preocupantes, siendo necesario controlarla midiéndola a diario, consultar con un médico especialista y seguir tanto una dieta adecuada como un modo de vida que ayude a regularla.
De cualquier manera, en los últimos años la hipertensión se ha revelado como uno de los trastornos en la circulación sanguínea más extendidos entre la población adulta, afectando a alrededor de un 40% de la población española. El gran problema que plantea la hipertensión es que en muchos casos no muestra síntomas, siendo una enfermedad silenciosa que solo se detecta cuando ya ha generado daños de consideración.
En una gran mayoría de los casos de tensión arterial alta, las causas son desconocidas y, en función de las circunstancias o del grado de afectación, requerirán de medicamentos para poderla estabilizar. No obstante, también existen otras medidas o remedios naturales que han demostrado eficacia y que pueden favorecer a bajar los niveles altos de presión arterial. ¡Atención!
1.Reduce la ingesta de sodio
Es probablemente la primera medida que recomiendan los médicos. En las últimas directrices aprobadas por el Comité de Exámenes de Directrices de la Organización Mundial de la Salud, se recomienda un aporte diario de tan solo 2g de sodio, lo que se traduce a 5g al día de sal. Pero esto no es exclusivamente relacionado con la sal que utilizamos para condimentar los alimentos, en la lista también se incluyen todos aquellos procesados que consumimos que también pueden contener grandes cantidades de sodio. Por ello es tan importante aprender a leer las etiquetas de los alimentos cuando hacemos la compra, y así saber identificar lo que nos vamos a comer.
Reducir la ingesta de sodio es uno de los consejos de los especialistas cuando de reducir la presión arterial se habla. (Freepik)
2. Haz ejercicio
El ejercicio bien hecho puede traer numerosos beneficios para nuestra salud, entre ellos, reducir las cifras de tensión arterial. El ejercicio siempre se debe adaptar a cada persona y según sus posibilidades, y tal como comentábamos en el punto anterior, se debe hacer de forma moderada. Intenta con rutinas como caminar o hacer marcha nórdica, bailar, salir a dar un paseo en bici. Otro de los ejercicios muy recomendado es la natación, que además te ayudará, al igual que cualquier ejercicio, a mejorar tu salud cardiovascular.
3.¿Sobrepeso u obesidad? Es momento de trabajar en eso
Y no tiene que ser a lo bestia, una dieta super estricta y ejercicio sin parar, eso sería contraproducente incluso para tu salud articular, pero, se ha demostrado que bajar entre 2 y 3 kilos, funciona para disminuir la tensión.
4. Cambia tus hábitos alimenticios e intenta llevar una dieta basada en plantas
Aumentando el consumo de verduras, hortalizas y verduras, pues su gran aporte en minerales tales como el potasio y el magnesio, son muy buenos para reducir la presión arterial. Así mismo, las dietas basadas en plantas son muy beneficiosas debido al aporte de antioxidantes como la quercetina, flavonoides, antocianinas, entre otros.
Estos fitoquímicos actúan como vasodilatadores favoreciendo la circulación sanguínea. Algunos especialistas recomiendan la dieta DASH (dietary approaches to stop hypertension) para personas que sufren de hipertensión, pues además de las verduras y las frutas, este modelo de alimentación también incluye cereales integrales y legumbres.
Es importante incluir más verduras, frutas, legumbres, hortalizas y cereales integrales en la dieta. (Freepik)
5.7 complementos alimenticios que puedes añadir a tu dieta
Si tu médico no te ha recetado ningún fármaco para controlar la presión arterial porque no lo considera necesario, existen ciertos complementos que contienen nutrientes específicos y que puedes incluir en tu dieta como medida preventiva. Estos pueden ser:
-Magnesio: favorece la relajación muscular de los vasos sanguíneos, disminuyendo así la tensión arterial.
-Extracto de olivo: el oleuropeósido, vital principio activo de esta planta tiene un efecto vasodilatador, traduciéndose en un efecto hipotensor. Puede consumirse en infusiones.
-Extracto de espino blanco: tiene un efecto sedante sobre el sistema nervioso, y está demostrado que ayuda a reducir palpitaciones. Así mismo, el espino blanco es un potente tónico cardíaco.
-Cola de caballo: Contribuye a eliminar la retención de líquidos sin perder minerales.
-Ajo negro envejecido: Tiene un efecto antiinflamatorio gracias a componentes como el S-alil-cisteína, un compuesto azufrado que le confiere también una capacidad antioxidante.
-Péptidos lácteos: El consumo de leche puede proveer proteínas como la caseína, que son el principal componente proteico, alrededor de un 80%, y las proteínas de suero, que, al ser digeridas por ciertas enzimas, permiten la obtención de péptidos bioactivos que actúan como inhibidores de la angiosteina II, responsable del estrechamiento de los vasos sanguíneos. Dichos péptidos tienen unos efectos muy beneficiosos para la salud. Así mismo, los péptidos pueden ser antihipertensivo, antioxidante, antitrombótico, hipercolesterolémico, opiáceo, quelantes de minerales, antiestrés, inmunomodulante, antimicrobiano, citomodulante, anticariogénico, etc.
-Fibra: El aporte de fibra soluble ayuda a reducir el colesterol alto y mejora la resistencia a la insulina, contribuyendo a una disminución de la tensión arterial.
